Mamoplastia de aumento
Consiste en la colocación de prótesis de gel cohesivo de silicona en espacios confeccionados debajo de la glándula mamaria, debajo del músculo pectoral o a doble plano según sea la indicación en cada paciente para aumentar tamaño, simetrizar volúmenes o corregir deformidades de las mamas.
La cirugía de aumento mamario consiste en la colocación de prótesis de gel cohesivo de silicona en espacios confeccionados debajo de la glándula mamaria, debajo del músculo pectoral, debajo de su fascia o a doble plano según sea la indicación en cada paciente para aumentar tamaño, simetrizar volúmenes o corregir deformidades de las mamas.
Se realiza bajo anestesia general y tiene un gran número de variaciones en la técnica de acuerdo con la vía de abordaje, el plano en que se colocan las prótesis y un sinnúmero de tipos y marcas de prótesis.
En cuanto a la cicatriz, puede posicionarse en el surco submamario, en el reborde de la areola o en la axila, siendo la vía submamaria mi favorita, al no alterar la anatomía de la glándula mamaria, disminuyendo la incidencia de alteraciones en la sensibilidad de la mama, dificultades en la lactancia y contractura capsular.
Suelo informar muy bien a las pacientes que quieren realizarse un aumento de mamas, pues pese a ser una cirugía muy popular, no está exenta de riesgos, siendo los más frecuentes, la contractura capsular, la malposición de las prótesis y la ruptura de las mismas.
La intervención suele durar entre 40 minutos y un par de horas. Se aconseja una noche de hospitalización, y la recuperación suele durar 1 a 2 semanas dependiendo del plano de colocación de la prótesis y de la actividad física y laboral de la paciente.